¿Por qué perder una amistad puede doler más que un amor?
- Leonardo García

- 18 jun
- 2 Min. de lectura

Perder una amistad cercana —de esas que ya con como parte de tu familia— puede doler más que terminar con una relación amorosa. No es algo que se diga mucho, pero es real. Y tiene razones profundas.
Según la psicóloga Khristin Highet, muchas veces la amistad, sobre todo entre mujeres, está cargada de una intimidad emocional tan fuerte como el amor romántico. Comparten secretos, crisis, triunfos, sueños. Y sobre todo, la creencia de que “esa persona siempre va a estar ahí”. Por eso, cuando se rompe el vínculo, el vacío que queda es difícil de llenar.
Una mala noticia es que, de acuerdo con la especialista, conforme crecemos es más probable que perdamos nuestras amistades más valoradas, pues cada quien comienza a hacer su vida y la separación es casi inevitable.
A diferencia de las rupturas amorosas, las amistades casi nunca tienen un cierre claro. Socialmente, perder a un amigo o amiga de varios años no tiene el mismo impacto que cuando cortas con un novio o novia.
Es como si no importara, y justo por eso, el duelo se vuelve más solitario, porque cuando se lo cuentas a otras personas, no les genera la misma empatía o interés por saber si distanciarte de tus amigos te duele tanto o más que cuando rompiste con alguien.
El dolor también nace de lo que perdiste cuando dejaron de hablarse. Tal vez con ese amigo o amiga viviste tus momentos más vulnerables, te acompañó cuando nadie más lo hizo, o fue tu refugio en etapas difíciles. Cuando eso desaparece, no solo pierdes a alguien: pierdes un espacio seguro.
También, seas mujer u hombre, queda algo de culpa por haber dejado de hablar con tu amigo o amiga. Porque a veces no sabes bien qué falló. No hubo una pelea ni una traición clara. Solo se distanciaron. ¿Fuiste tú? ¿Fue él o ella? ¿Pudiste haber hecho algo distinto? Las preguntas se quedan dando vueltas mucho tiempo.
Pero como todo duelo, también se puede sanar. Empieza por reconocer que duele, y que ese dolor es válido. No necesitas justificarlo ni esconderlo. Habla de ello con otras personas, seguro que a alguien de tu círculo cercano le va a interesar como te sientes.




Comentarios