¡Cuidado con lo que tomas! Podría ser alcohol adulterado

Comprar una botella cualquiera en la tienda de la esquina, o en un bar de mala muerte cercano a la prepa y compartirla con tus amigos suena a un buen plan de viernes. Pero si no tienes cuidado podrías tener muchos problemas.

No te vamos a decir que no tomes, esa ya es una decisión que tú mismo debes valorar. Lo que queremos advertir es sobre el riesgo de que te vendan o compres deliberadamente alcohol adulterado.

Este tipo de bebidas no pasan por controles sanitarios. Muchas veces están mezcladas con sustancias tóxicas como el metanol, un químico que, en lugar de emborracharte, puede matarte.

Existe la creencia de que esto solo pasa si compras alcohol en tianguis o en lugares raros. Pero no. Te puede pasar en una fiesta, si alguien lleva una botella abierta de dudosa procedencia.

Incluso en bares y antros que parecían seguros se han dado casos de que los responsables del lugar le compran bebidas adulteradas a proveedores sin verificar.

Señales de que tu cerveza o trago está adulterado

El alcohol adulterado no siempre se nota a simple vista, pero hay cosas que puedes observar.

Por ejemplo, si eres de los que pide cerveza, las botellas con etiquetas borrosas, sin sellos de seguridad, con tapa floja o marcas desconocidas son las primeras de las que hay que dudar.

Y si eres más de tragos o bebidas preparadas, si el líquido huele raro, sabe raro o arde demasiado al tragarlo, es mejor que ya no te lo tomes. Si es demasiado barato, también es una alerta.

La COFEPRIS ha dicho que muchas de estas bebidas se hacen en condiciones insalubres, sin control, y con químicos que ni siquiera están pensados para el consumo humano.

En México ya han pasado casos muy graves relacionados con esto. En Jalisco, por ejemplo, decenas de personas murieron por tomar alcohol de caña mezclado con metanol.

En Puebla, un joven perdió la vida por beber de una botella sin etiqueta. Y hay más casos en Veracruz, Morelos y otras zonas donde el mercado informal de bebidas creció, sobre todo después de la pandemia.

Los síntomas no siempre llegan de inmediato. A veces es al día siguiente, cuando ya es tarde: dolor de cabeza intenso, visión borrosa, vómito, dificultad para respirar. En ocasiones, estos síntomas se relacionan con la cruda, pero al ser más fuertes ya es una señal de alerta de que debes buscar ayuda.